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13 de febrero de 2011

Una nueva vida ( I )



Cuando, poco a poco, vamos transcendiendo nuestra identidad, nuestro ego, empezamos a tener una experiencia completamente diferente de nosotros mismos y de la realidad. Hay una metáfora que se utiliza mucho para describir este proceso. Imagine el lector que durante toda su vida se ha creído que era el personaje de una película. La película es propia vida como normalmente experimentamos, con sus momentos de alegría y sus momentos de profunda tristeza.
Ahora, imagínese por un instante que se diera cuenta de que usted no es ninguno de los personajes de esa película, sino que es un espectador dentro de un cine. Aunque pueda llorar y reír con lo que les pasa a los personajes, usted sabe que no es ninguno de ellos. Cuando quedamos envueltos en uno de los personajes de la película, creemos que somos eso y nada más que eso. Esto es una plena identificación con nuestra personalidad. Sin embargo, cuando nos damos cuenta de que en realidad somos el espectador que contempla la película, entonces nos estamos identificando con nuestra verdadera esencia, con lo que somos en realidad. Éste es el plano del ser: hemos trascendido el personaje y nos hemos encontrado con nuestra verdadera naturaleza que es espiritual. Es esta distancia del drama lo que le permite mantener una serenidad y una ecuanimidad sea lo que sea lo que ve en la pantalla. Por eso, hay personas que ante las circunstancias más duras no pierden ni su equilibrio ni su paz interior.

Extracto del libro “Reinventarse”  del  Dr. Mario Alonso Puig

4 comentarios:

Maeglin dijo...

Yo de pequeño con 5 o 6 años tenía la firme convicción de que estaba dentro de una pelicula y que cuando llegase el momento de partir, de morir, unas letras salvadoras de THE END lo evitarían. Bendita inocencia.

mr.pickwick dijo...

si mi vida es una pelicula, quiero ser el guionista, el director y el actor principal...


tambien me pido el mejor reparto posible...


toma 1, cámara... ACCION!!!

A-B-C dijo...

Joer qué bien explicado. A mí todavía me queda mucho para llegar a sentirme expectadora, espero conseguirlo algún día.
Muy buena selección. Tomo nota, se me acumula el material

Layna dijo...

Maeglin. Pues si, bendita inocencia pero la idea es preciosa, que unas palabras te puedan salvar y no lapidar... genial.

mr. pickwick. Pues si, mejor ser uno mismo quien decide en su propia vida!

A-B-C. A mi también me queda muuucho A-B-C pero lo importante es saber hacía donde vamos y así seguro que lo conseguimos.